Mi historia de la adolescencia a la madurez: el papel de los collages

Quiero contaros mi experiencia, los inicios de mis problemas hasta la solución actual. Una de las herramientas que utilicé para iniciar mi cambio, mi vuelta a la vida, fue el descubrimiento de la técnica del collage. Os presento estos trabajos que me ayudaron mucho a salir de uno de los problemas más importantes con los que tuve que enfrentarme: la droga. A través de los collages entendí que lo que ésta me aportaba, lo que sentía tomándola, no tenía nada que ver con mi personalidad. Me sirvieron para reconocer mi comportamiento autodestructivo y aprender a encontrar una nueva vida. Cuando iba al colegio tenía una baja autoestima. Yo era un niño feliz y en un momento determinado comencé a sentirme mal conmigo mismo, au_nque no logro averiguar las causas, pero seguro que influyó el bulling a la que me sometieron mis supuestos amigos y que yo en ese momento no fui capaz de identificar.

La cosa fue creciendo en el instituto. Tenía que demostrar a mis compañeros lo guay que era. Ellos pensaban que, efectivamente, yo era así, pero cada vez me sentía peor. No me reconocía en esas actitudes y la angustia y la depresión cada vez eran mayores.

Durante años, gran parte de mi ocio lo pasaba en el bar. Yo veía lo que pasaba, pero era mi forma de agradar a los demás.

Me di cuenta de que necesitaba ayuda. De mi familia y de profesionales, psiquiatra, psicólogo…y empecé a reflejar mis emociones y sentimientos en estos collages.

Empecé a cambiar muy lentamente, paso a paso.

La técnica del collage a nivel psicológico ayuda al paciente a sacar la maraña de sus pensamientos para verlos, ordenarlos y analizarlos en algo externo a su mente. Cuando plasmas en un collage tus creencias, en las que tienes fe ciega, absolutamente firmes, inamovibles, te das cuenta de que la realidad es otra y esto te ayuda a cambiar.

A partir de la realización de estos trabajos cambió mi perspectiva con respecto a las drogas y empecé a buscar hábitos de vida mucho más saludables, uno de ellos fue el deporte y otro el voluntariado que me permitieron conocer otros ambientes y otras personas.

Con esta historia quiero reflejar que la técnica del collage es una muy buena herramienta para ordenar los pensamientos obsesivos de las personas afectadas con algún tipo de enfermedad mental, pero no puedo decir que haya sido la única herramienta para tener mayor calidad de vida.

Mi evolución se puede apreciar en estos nuevos collages. A la derecha mi visión anterior, en blanco y negro y con la realidad distorsionada. A la izquierda un cerebro en color dónde existe la luz, la música y animales de vivos colores.

En la siguiente imagen, a la izquierda, la visión de un mundo cada vez más reducido de la droga y a la derecha mis gustos, los que habían estado escondidos y que se ajustaban más a mis personalidad.